A las tres de la madrugada de ayer miércoles, la muerte sorprendió a William Antonio Ceballos, de 41 años de edad, en momentos cuando dormía solo en su habitación. Su verdugo le propinó cuatro balazos para luego huir a toda carrera a bordo de un vehículo que lo esperaba afuera.
Varios vecinos de la calle Francisco de Miranda del barrio Altamira, adyacente a la escuela «Herlinda de Valero», se despertaron al escuchar las detonaciones, las cuales fueron seguidas de la picada de cauchos de un vehículo, en el que se supone escapó con sus compinches.
«Varios vecinos dijeron escuchar, en medio de la quietud de la madrugada, un motor a toda velocidad, pero señalaron que al asomarse apenas vieron un carro pequeño a lo lejos», refirió el jefe de la Policía Científica, región Barinas, comisario Humberto Ramírez. El jefe policial agregó que Ceballos, quien desde hace años vivía solo y un tanto descuidado en su apariencia y en su vida en general, fue blanco de cuatro impactos de bala, uno de ellos en la cabeza. LA PRENSA DE BARINAS