UNA CRONICA de 1920 daba cuenta de un suceso similar
En la década de 1920, un médico estadounidense, el Profesor Nasher, escribió esta crónica en la edición dominical del “New York American”:
«Es una notable hazaña acrobática o contorsionista. Notable por su novedad como por el persistente entrenamiento necesario para lograrla.
En cualquier hombre ordinario esta hazaña acabaría en la estrangulación o luxación de la vértebras del cuello, con el consiguiente daño a la médula espinal, y probablemente produciría parálisis del cuerpo o incluso la muerte instantánea…
Y es que Martin Laurello tenía la asombrosa capacidad de girar su cabeza 180 grados, hasta apoyar el mentón de la barbilla en su espalda. Era capaz de andar hacia delante mientras miraba hacia atrás; también podía girar su cintura y el pie derecho 180 grados. http://aldea-irreductible.blogspot.com/2009/06/el-hombre-que-giraba-su-cabeza-180.html