Por estos días ha habido una guerra de declaraciones entre Mario Silva, conductor de La Hojilla,el Colegio Nacional de Periodistas (CNP) y el portal Noticiero Digital. Cada uno dice defender los intereses de los ciudadanos al momento de informar.
El CNP, que bien sabemos está pintado en la pared para defender las causas justas de la comunicación, emitió un comunicado en el que rechaza la actitud del comunicador de VTV por las palabras proferidas contra el editor de El Nacional y su madre.
Silva en su programa no tienes pelos en la lengua para decir groserías e insultar a quienes les de la gana
No hay organismo (Conatel) que le plante cara, y menos cuando su primer seguidor es el Presidente de la República.
No es periodista colegiado pero usurpa las labores del comunicador, claramente delimitadas por el código de ética y la Ley del Ejercicio del Periodismo.
Tiene influencia en el gobierno y resto de los Poderes. Sus opiniones son atendidas con frecuencia y muchos ministros utilizan su espacio para informar, siendo el Presidente el primero de ellos.
Silva mira una conspiración en cada metida de pata del gobierno o en sus ineficiencia. Utiliza esta manoseada palabras de cliché para explicar los supuestos ataques contra el gobierno por sus desafueros
Pocos se atreven a denunciarlo ante tribunales porque saben que es una pelea perdida de antemano, porque lo protege Chávez.
Tiene varios escoltas y dice no temer nada. Ha destapado importantes matrices informativas así como dado varias primicias en su programa.
No tiene empacho para insultar a miembros de la oposición así como a periodistas, que a su vez lo llaman «El señor de la Noche», el «Drogo» y otros epítetos. A ello se reduce el análisis de las ideas entre algunos conocidos periodistas y comunicadores de la oposición y gobierno
Mientras esté Chávez en el poder, previsiblemente Mario Silva continuará teniendo muchos privilegios, como, por ejemplo, mostrar grabaciones (prohibidas por violar la privacidad de las personas), así como otros organismos de inteligencia
El canal 8 debe impulsar un periodismo sano, que compita en creatividad, cobertura e información con la oposición y todos sus grandes medios, en vez de utilizar a un personaje grosero, impresentable e irrespetuosos como Silva. RUBEN MARCANO/IO