El regreso inesperado del mandatario venezolano, Hugo Chávez, a su país no disipa el clima de incertidumbre que existe entre los ciudadanos, que aún se preguntan por el alcance de la enfermedad que padece y si podrá participar en las elecciones presidenciales de 2012.
Según el analista, Chávez debía regresar “incluso enfermo” para poner un freno a las “pasiones internas” y “luchas por el poder” en el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
“La incertidumbre sigue viva, antes como ahora”, aseguró León.
Para el responsable de Datanálisis, el retorno de Chávez genera, sin duda, una gran emoción a corto plazo dentro del grupo de seguidores, lo que no elimina, sin embargo, la inquietud de cara al futuro.
“Chávez tiene que ser muy fuerte, y estar en campaña como si nada para que la gente olvide que está enfermo”, dijo León, y explicó que esta actitud ayudará a que sus seguidores lo vean como un “candidato posible” que va a resistir seis años más al frente del Gobierno.
El periodista y analista Clodovaldo Hernández, profesor de periodismo de la Universidad Bolivariana de Venezuela, aseguró a Efe que será la evolución médica del presidente la que orientará el futuro político del país.
En su opinión, por ahora es evidente que Chávez gozará de una mirada positiva de sus partidarios y de “los que no lo son tanto” pues estas situaciones suelen generar sentimientos de solidaridad.
“Habrá que ver cómo continua la gestión del Gobierno, evidentemente los problemas del país no son solo la enfermedad del presidente”, señaló Hernández.
El analista cree que una de las razones que llevaron al mandatario a adelantar su regreso fue la necesidad de ponerle fin a la incertidumbre general “porque estaban ansiosos tanto los partidarios como los que no lo son”.
Para Hernández, además, esta situación dejó en evidencia que el único liderazgo verdadero dentro del chavismo es el del mandatario y que “cualquier otro liderazgo dentro del movimiento revolucionario en general está muy distante” de esa supremacía. EFE