No lo hacen ni por sentimiento ni por emoción, pero los cocodrilos lloran. Sus lágrimas son casi tan famosas o más que su fiereza y han dado lugar a algunas leyendas que en ningún caso se corresponden con la realidad. ¿Quieres saber por qué los cocodrilos lloran?
Los cocodrilos lloran cuando salen del agua para mantener los ojos húmedos, hidratados. Esta es la razón principal, aunque no la única, por la que las glándulas lacrimales de esta especie segregan líquido cuando el animal está en la superficie.
Los cocodrilos lloran también cuando comen, en el momento en el que devoran a sus presas con apetito y voracidad. Esto ocurre porque tienen las citadas glándulas lacrimales próximas a las salivales, de tal forma que cuando las segundas se estimulan las primeras hacen lo propio.
Durante algún tiempo se creyó que los cocodrilos lloraban por lástima mientras engullían a sus presas, pero se sabe que no es así. Tampoco es cierto que se coman a sus propias crías, aunque en ocasiones sí las introducen en la boca para transportarlas al agua. FUENTE: SABERIA