Una vez más queda en evidencia que las dictaduras aliadas de USA, siempre son mucho más toleradas por la crítica de la prensa que cuando se trata de gobiernos que no son obsecuentes con USA y sus aliados. Y una vez más queda felizmente en evidencia, que la historia de la liberación del ser humano, no se detiene frente a las dictaduras, ni puede ser ocultada por la manipulación mediática.
Sabemos que no les será fácil, no solamente porque tendrán que luchar contra sus propios gobiernos represores y corruptos, sino porque también estarán en el medio de una puja internacional: por una parte USA y sus aliados, que no querrán perder el control de esos países, y por otra parte los partidarios del fanatismo violento que buscarán capitalizar el descontento. Pero más allá del rumbo ocasional que vayan tomando los acontecimientos, queda claro que el clamor de los pueblos se está haciendo escuchar.
El mundo no es el que nos muestran los medios de comunicación, con el sesgo de los intereses de quienes pretenden erigirse en los amos del mundo. El mundo real es el de miles de millones de personas oprimidas, marginadas, y empobrecidas, cuyas voces no podrán ser acalladas eternamente. A veces ese clamor humano se expresará de modo pacífico, y a veces de un modo equivocadamente violento, pero se seguirá manifestando, contra todo pronóstico del poder y de los medios. MAS DETALLES