Entre chavistas y opositores tienen al país loco, de verdad. Vamos para mal por cualquiera de las dos vías políticas que se polarizan.
Quien les habrá dicho a estudiantes opositores, militantes de partidos políticos, que una huelga de hambre se hace con bebidas energizantes, con suplementos alimenticios y arepas.
Por Dios, hasta cuando el país tiene que asistir a los circos de chavistas y opositores, que degradan la política e instituciones.
En nuestros tiempos, los estudiantes peleaban por reinvindicaciones como salarios justos, pasaje estudiantil, comedores, bibliotecas modernas, entre otras. Ahora no, las huelgas, además de tener un cañón mediático importante que las respalden, también son chantajes para que liberen a personas incursas en delitos graves, que fueron comprobados. EQUIPO DE REDACCION INFORME ONLINE