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Atravesar el infierno de la inseguridad

28 marzo, 2011

«Ellos mueren y ellas lloran», dice Magally Huggins, investigadora del Centro de Estudios de Desarrollo de la Universidad Central de Venezuela y miembro del equipo coordinador del Observatorio Venezolano de los Derechos Humanos de las Mujeres. Acuñó la frase para resumir la lógica de la violencia en Venezuela: más de 80% de los caídos por homicidios es de sexo masculino y tiene entre 15 y 45 años de edad según la última estadística del Ministerio de Salud. Son de origen humilde.

En los últimos 13 años, según los cálculos de la académica, 1 millón de personas se convirtieron en «víctimas secundarias» de esos delitos. La gran mayoría, aproximadamente las dos terceras partes, fueron mujeres que atravesaron un infierno como el descrito por Rozana González. Son, como ella, sobrevivientes que deben lidiar no sólo con la pérdida de sus familiares, sino con el resto de las secuelas destructivas que deja la inseguridad. La primera, para Huggins, es el duelo traumático: «Es un gran problema de salud pública y afecta principalmente a la población femenina». Lo describe como una «epidemia de dolor». MAS DETALLES