La compañía aérea Aerolíneas de Hong Kong hace que todos los miembros de las tripulaciones de sus aviones se sometan a cursos obligatorios de Kung fu. Según la idea de los dirigentes de la empresa, el arte marcial tendría que ayudar a los trabajadores a tratar con borrachos y otros pasajeros rebeldes.
Según el representante de la compañía, Eva Chan, cada semana ocurren tres incidentes relacionados con pasajeros revoltosos.
Por ejemplo, hace dos semanas, una de las aeromozas tuvo que recurrir a las técnicas a bordo de un avión que iba desde Pekín (capital de China) con destino a Hong Kong.
“Uno de los pasajeros se sintió mal, parece que iba borracho. Una de las aeromozas le estaba atendiendo y se dio cuenta de que su forma física le estaba ayudando a dominarlo ya que el hombre era bastante pesado”, contó Chan. MAS DETALLES