Sin hacer mucho ruido, porque en la mayoría de los casos se trata de entidades financieras de un tamaño reducido, el caso es que a falta de algunos días para que termine el 2010, cerca de 160 bancos en los EEUU habrán pasado a mejor vida.
La cifra supera claramente las 140 quiebras bancarias que en los EEUU del 2009 y la poco más de una treintena del 2008, lo que nos da una idea bastante clara de que aún no hemos tocado el punto de inflexión en la presente crisis económica.